El presidente de Corea del Sur, Lee Myung Bak, ha proclamado que cambiará las políticas de seguridad nacional, centradas actualmente en la “defensa pasiva”, para aplicar “estrategias de disuasión” más activas. Asimismo, ha declarado que no tolerará las provocaciones de Pyongyang e invocará el derecho a la autodefensa ante cualquier amenaza del régimen norcoreano.
En el mensaje a la Nación que pronunció el lunes 24 de mayo, el jefe de Estado surcoreano definió la explosión de la corbeta Cheonan como una clara provocación militar de Corea del Norte. Manifestó que hasta ahora el Gobierno de Seúl ha sido paciente, pero en adelante el país comunista deberá pagar por sus acciones.
Lee advirtió de que si Pyongyang lanza otra de sus amenazas beligerantes contra territorio surcoreano, activará inmediatamente el sistema nacional de autodefensa.
El presidente subrayó que impondrá fuertes medidas en respuesta al ataque de Corea del Norte al buque Cheonan. En concreto, anunció la prohibición total del tránsito de barcos comerciales norcoreanos por aguas sureñas, actividad que estaba permitida conforme al Acuerdo Intercoreano de Transporte Marítimo.
El mandatario declaró, además, la interrupción inmediata de la cooperación y el intercambio entre las dos Coreas. No obstante, dejó claro que mantendrá vigente la ayuda humanitaria a los norcoreanos, sobre todo la vinculada con los programas de bienestar infantil.
En cuanto al Complejo Industrial de Gaesong, el líder surcoreano sostuvo que estudiará la forma más adecuada de tratar el asunto, sin olvidar la particularidad de dicho proyecto de cooperación económica intercoreana.
Creditos: KBS World + AVCC 안녕하세요!
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